La minería es uno de los entornos de trabajo más complejos, y cuando su personal y su flota están bajo tierra, debe tener el control en todo momento.
Las empresas mineras enfrentan usos indebidos diarios de la flota, lo que provoca fallas mecánicas graves y roturas prematuras de vehículos multimillonarios.
Un monitoreo de activos específico podría arrojar luz sobre cómo abordar este problema común y, por lo tanto, ahorrar millones en productividad y eficiencia.